De acuerdo con la agenda oficial publicada, ambos gobernantes se reunirán a las 11:00 hora local en el Palacio Itamaraty, sede de la Cancillería.
Brasil y Paraguay negocian un nuevo entendimiento sobre la división y tarifa de la energía producida en la planta, que queda en la frontera entre los dos países.
El valor se decide anualmente, pero todavía está indefinido por impases entre las partes.
Asunción defiende el aumento de la tarifa, mientras que Brasilia quiere la reducción. Como Paraguay consume menos, el Gobierno nacional compra parte de la mitad del país.
Con la crecida de consumo del vecino registrado en los últimos años, la oferta para los brasileños disminuye y, con ella, la tasa del costo de la energía cedida a Brasil.
Al Paraguay vender el excedente a Brasil, le interesa tener una tasa más alta.
El altercado sobre el presupuesto de 2024 comenzó en diciembre, cuando debería haberse decidido el precio. No hubo definición.
La tarifa de Itaipú depende del valor necesario para cubrir los gastos del llamado Costo Unitario de los Servicios de Electricidad, que resulta lo pagado por los contribuyentes de los dos países para cubrir los costos de operación y mantenimiento de la planta, y los traspasos de royalties (regalías) de uso del agua.
Una nota del Ministerio de Relaciones Exteriores indica que Peña, quien cumplirá en Brasilia una visita de trabajo, el pasado año también se reunió con Lula en esta capital el 16 de mayo y el 28 de julio, cuando aún era presidente electo.
Ahora, precisa el contenido, los dos mandatarios tratarán «los principales asuntos en las agendas bilateral y regional, entre ellos el de Itaipú Binacional, las obras de integración de infraestructura, el combate a los ilícitos transnacionales y el Mercosur».
mem/ocs