Los visitantes requeridos de esa documentación tienen dificultad para encontrar alojamiento, agravan la crisis de vivienda, y muchos terminan en refugios para personas sin hogar, expresó en una carta al Ejecutivo el jefe de Gobierno del referido territorio, François Legault, citado por la agencia The Canadian Press.
Otros solicitantes de asilo –afirma el texto- se ven obligados a vivir en las calles, lo cual agrava un problema ya de por sí complejo, especialmente en invierno, mientras las organizaciones que otras veces los acogen y apoyan ya no son suficientes para responder a la demanda.
«Estamos muy cerca del punto de quiebre debido al excesivo número de solicitantes de asilo que llegan mes tras mes. La situación es insostenible», subrayó en su misiva el gobernante, quien recordó que en 2022 la provincia acogió a más solicitantes de asilo que todo el resto de Canadá.
Según Legault, las llegadas de extranjeros a los aeropuertos siguen aumentando significativamente, igual que el número de personas que arriban con visas de visitantes y necesitan documentación oficial.
La provincia de Quebec registró cerca de 60 mil nuevos demandantes de acogida en el país durante los primeros 11 meses de 2023, lo que provocó «una presión muy importante sobre los servicios», enfatizó el gobernante.
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