Escogido como último refuerzo por el mentor de los Cocodrilos, el impetuoso lanzador fue designado para enfrentar a los Cazadores de Artemisa en un momento en que el duelo por el campeonato se encuentra empatado a un triunfo por bando.
«Me siento muy bien para lanzar mañana y entregarlo todo en el terreno», le dijo a la agencia el inquieto serpentinero, que hará su debut con el uniforme yumurino en los predios del estadio 26 de Julio con el público en contra.
El derecho de Quivicán viene de tener un excelente año con su equipo Mayabeque en la Serie Nacional, con las Panteras de Kichner en la Liga de Canadá y con Las Tunas en la fase clasificatoria de esta Liga Élite.
En el playoff semifinal les trabajó 11.1 capítulos a los matanceros, solo aceptó tres anotaciones limpias y exhibió un promedio de bateadores embasados por entrada (Whip) de apenas 1.15, lo que llamó la atención de sus rivales.
«Quiero agradecerles a Armandeo Ferrer y a su cuerpo de dirección por haber confiado en mí y pedirme de refuerzo», señaló, y confesó que no se sorprendió con la decisión porque ya habían hablado con él antes de finalizar el duelo semifinal.
Martínez es un lanzador de mucha energía que le da colorido a los partidos por su entrega y pasión, herramientas que cobran más importancia en este tipo de desafíos de altas tensiones.
«Mi estrategia contra cualquier equipo es el control y el pitcheo fino. No dejarlos pensar en la caja de bateo y obligarlos a conectar los lances que yo quiero y no los que quieran ellos», aseguró.
«Al final ganará el que mejor lo haga en el terreno», concluyó.
El tercer partido de esta serie al mejor de siete encuentros está pactado para este viernes a las 13:30 hora local.
lam/blc