La serie se disputa en Venezuela y participan 10 equipos de la subregión divididos en dos grupos, cada uno encabezado por las principales potencias del área: Brasil y Argentina.
Sólo los que finalicen la serie en el primer lugar de cada llave tendrán acceso a la cita universal.
Durante la primera mitad del choque chilenos y uruguayos estuvieron parejos, con alternativas en las dos porterías que no fructificaron.
En el arranque del segundo tiempo los charrúas dominaron las acciones, pero el arquero de la Roja, Vicente Reyes, tapó disparos que casi se cantaban como gol.
Al minuto 61 el entrenador de Chile, Nicolás Córdoba, metió a la cancha a Gonzalo Tapia y Clemente Montes para sustituir a Alexander Aravena y César Pérez, y la maniobra le dio réditos de inmediato.
Dos minutos después en una jugada de contragolpe Tapia controló el balón por la banda derecha y lanzó un certero centro que Montes aprovechó para marcar el tanto que, a la postre, fue definitivo.
La desventaja desconcertó a los uruguayos y Chile pudo ampliar la diferencia, pero el guardameta rival, Randall Rodríguez, se lució con atajadas increíbles.
En los últimos minutos del choque el equipo dirigido por Marcelo Bielsa puso sitio al arco de la Roja, pero los defensores y el arquero resistieron hasta el silbatazo final.
Chile, con tres puntos en dos partidos, está en cuarto lugar de su grupo por debajo de Perú, que tiene la misma cantidad de unidades, pero los derrotó en el choque anterior, Argentina ocupa el segundo escaño y Paraguay se mantiene en la primera posición.
Uruguay, con dos derrotas consecutivas está en el sótano y tiene muy complicado el camino para conseguir el boleto a París.
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