La organización sindical (GTU por sus siglas en inglés) ha reaccionado debido a la decisión gubernamental de deducir dinero de los salarios de los docentes en huelga por los días que estuvieron ausentes de las aulas, lo que generaría perjuicios a más de seis mil miembros, según datos ofrecidos a la prensa nacional.
Asimismo, representantes de la entidad solicitaron un total de 18 exenciones tras alegar violación de su derecho a la libertad de asociación y reunión; su derecho a la protección contra la privación de propiedad; y su derecho a ser oído antes de determinar que cese la práctica de actuar para descontar las cuotas sindicales de los sueldos y salarios de los docentes.
Tras la petición registrada, el fiscal general Anil Nandlall anunció la orden de cesar la deducción de las cuotas sindicales, no restar los salarios de los profesores en huelga así como la voluntad de participar en el proceso de negociación colectiva continua.
Luego de dos semanas de manifestaciones, la orden conservadora establece que el status quo seguirá siendo el mismo, es decir, que el Gobierno de Guyana no recortará los sueldos a los participantes en cualquier acción industrial hasta que se determine el asunto, reafirmó el aviso de solicitud presentado por el presidente de GTU, Mark Lyte.
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