En la capitalina Plaza de Mayo, miembros de la Federación de Trabajadores de Prensa, el Servicio Paz y Justicia y el movimiento Libertad Assange Argentina participaron en un festival convocado para apoyar al fundador de WikiLeaks, mientras en Reino Unido tienen lugar audiencias para definir su continuidad o no en ese país.
También estuvieron representadas la Central de Trabajadores de Argentina-Autónoma (CTA-A) y las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo.
Esta iniciativa forma parte de una serie de acciones globales para pedir la liberación de Assange y rechazar el pedido de extradición a Estados Unidos.
El periodista enfrenta cargos por publicar información que revela crímenes de lesa humanidad en las intervenciones de las fuerzas armadas norteamericanas en Medio Oriente, señala un comunicado difundido por la CTA-A.
“Consideramos que su persecución representa una amenaza para todas las personas que reivindican la libertad de expresión, el libre ejercicio del periodismo y el derecho a la comunicación y la información”, añade.
Por su parte, la Corriente Peronista Descamisados repudió el accionar de Washington y Londres y exigió el respeto a las normativas internacionales y los derechos humanos.
Assange permanece encerrado en Reino Unido desde que Ecuador le retiró en 2019 el asilo político otorgado siete años antes y permitió que la policía lo arrestara en su embajada.
A mediados de 2022, el gobierno británico comunicó su decisión de autorizar su extradición a Estados Unidos, que pretende juzgarlo por sacar a la luz crímenes de guerra cometidos por sus militares en Iraq y Afganistán, y miles de archivos secretos de su diplomacia.
De ser procesado y declarado culpable por un tribunal de esa nación, podría ser condenado a 175 años de cárcel a partir de 17 cargos relacionados con la ley de espionaje que se le imputan.
El año pasado, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y otras personalidades entregaron cartas a la embajada de Reino Unido en esta capital, en las que aseguraron que ese país tiene la posibilidad soberana de sentar un precedente internacional en la defensa de la libertad de prensa como un derecho humano fundamental.
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