El Ministerio de Comercio declaró que las acciones de Washington socavan las normas y el orden económico internacionales, al tiempo que afecta la seguridad y estabilidad de las cadenas de suministro globales.
«China se opone firmemente a esto. Tomaremos las medidas necesarias para defender resueltamente los legítimos derechos e intereses de las empresas chinas», agregó la oficina del portavoz de esa cartera.
Por su parte, la vocera de la Cancillería Mao Ning subrayó hoy también su rechazo a estas sanciones y agregó que la cooperación comercial-económica normal entre Beijing y Moscú «no está dirigida a ningún tercero ni sujeta a ninguna interferencia por parte de ningún tercero».
«En cuanto a la crisis de Ucrania, China mantiene una posición objetiva e imparcial, se esfuerza por mantener conversaciones de paz y desempeña un papel constructivo para la solución política de la crisis», apuntó.
El Gobierno de Joe Biden anunció el viernes nuevas restricciones comerciales a 93 entidades de Rusia, China, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Kirguistán, India y Corea del Sur por supuestamente apoyar la operación militar de Moscú en Ucrania.
Recientemente y al margen de la Conferencia de Seguridad de Múnich, el ministro de Relaciones Exteriores del gigante asiático, Wang Yi, conversó con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, sobre estas y otras cuestiones.
La parte asiática abogó por el levantamiento de las «sanciones unilaterales ilegales contra empresas e individuos chinos» y señaló que ambos países deben adherirse a los principios de respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación.
En varias ocasiones Beijing acusó a Washington por abuso de acciones contra las exportaciones y productos chinos con el objetivo de contener el desarrollo del gigante asiático.
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