Un comunicado oficial indicó que durante el encuentro Yang Jiechi, director de Asuntos Exteriores del Partido Comunista, y el asesor norteamericano de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, de manera franca y profunda intercambiaron opiniones sobre las relaciones bilaterales, asuntos internacionales y regionales de interés común.
Ambos acordaron actuar según lo convenido antes por los jefes de Estado para reforzar la comunicación estratégica, manejar las diferencias, evitar la confrontación y buscar el beneficio mutuo, además de trabajar juntos a fin de reencauzar los nexos en el camino del desarrollo sano y estable.
De acuerdo con el texto, Yang enfatizó en la incidencia de los lazos Beijing-Washington para el mundo, rechazó definirlos de competitivos e insistió en priorizar la cooperación.
Beijing espera que la parte estadounidense pueda adoptar una política racional y pragmática hacia China y siga una senda de respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación de ganar-ganar, acotó el funcionario.
También remarcó la postura de tolerancia cero ante acciones injerencistas en asuntos como Taiwán, Hong Kong, Xinjiang, Tíbet, los derechos humanos y disputas marítimas, tras exigir respeto a la soberanía, seguridad e intereses de desarrollo nacional.
Mientras, Sullivan se refirió a las áreas donde ambos países pueden unir fuerzas y estuvo de acuerdo en mantener bajo control los riesgos latentes en los nexos bilaterales.
No obstante, citó las ‘preocupaciones’ de la Casa Blanca en distintos frentes y manifestó voluntad de continuar el contacto al más alto nivel con China para garantizar la competencia responsable.
La reunión hace unas horas en Zúrich constituyó un nuevo intento de las principales potencias del planeta por poner a un lado sus diferencias, atender las inquietudes en múltiples cuestiones y procurar un entendimiento satisfactorio para cada parte.
Su celebración siguió al regreso a China de la directora financiera de Huawei, Meng Wanzhou, luego de casi tres años de arresto domiciliario en Canadá por acusaciones estadounidenses de fraude bancario.
Ese caso desató una tormenta diplomática entre los tres países, pero aunque no está resuelto por completo, el retorno de la ejecutiva levantó las expectativas sobre una posible mejoría en los vínculos Beijing-Washington.
Incluso, se supo que la representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai, en breve sostendrá conversaciones con el viceprimer ministro chino, Liu He, y el tema central sería el acuerdo alcanzado durante el mandato del expresidente Donald Trump para sepultar la guerra comercial.
rgh/ymr