Andrade ratificó su clase y pasó con la mejor nota a la disputa de las medallas en el salto con 14.800 puntos y en las barras asimétricas (15.100), y finalizó octava en el otro aparato (13.400).
Aunque declinó participar en los ejercicios de suelo para abrirle las puertas del título universal en el concurso completo a la rusa Angelina Melnikova.
Sabía que si hacía el entrenamiento de suelo mi cuerpo no sería capaz de asumirlo y que podría ocurrir algo que no deseaba. No quiero volver a estar fuera de competición por una lesión, manifestó Andrade, de 22 años y operada tres veces de rotura de ligamentos en las rodillas.
Para Latinoamérica, la mexicana Natalia Escalera accedió a la final de salto con la sexta mejor nota, 13.633.
Por su parte, Melnikova sumó 57.065 unidades en los cuatro especialidades, por delante de los 55.749 y 55.700 de las estadounidenses Leanne Wong y Kayla di Cello, segunda y tercera, respectivamente.
En la final del jueves no se tendrá en cuenta las notas conseguidas en la fase clasificatoria, pero la rusa, oro por equipos y bronce individual en las Olimpiadas de Tokio, mostró una regularidad superior que la convierte en máxima aspirante al oro a sus 21 años, dos después de ser tercera en la anterior edición de Stuttgart.
Entre las 24 gimnastas clasificadas para la final del concurso completo destacan la japonesa Hitomi Hatakeda, la rusa Vladiskava Urazova, la portuguesa Filipa Martins (sexta, en la mejor actuación de su carrera) y las gemelas italianas Asia y Alice d’Amato, separadas por solo una milésima en los puestos 12 y 13.
Entre las representantes latinoamericanas, la ecuatoriana Alais Perea terminó la ronda de clasificación en el puesto 29 (48.274 puntos), la mexicana Paulina Campos en el 31 (47.899) y la colombiana Yiseth Valenzuela en el 45 (45.899).
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