La sesión parlamentaria, que comenzó esta mañana y se extendió hasta la noche, fue una suerte de acusaciones entre el gobierno del primer ministro socialista Antonio Costa y el resto del arco político, que también cruzó lanzas entre la izquierda y la derecha.
Tal panorama anticipa lo que ya desde diversos sectores se comenta desde la semana pasada –y con fuerza desde la víspera- de que el plan presupuestario será derrotado, lo cual llevará a elecciones anticipadas, probablemente en enero del año próximo.
Catarina Martins, la coordinadora del Bloque de Izquierda, aseguró que el gobierno tal vez quiera una crisis política.
No logro comprender cuál es la estrategia del ejecutivo, a no ser que quiera unas elecciones anticipadas, lo cual denota una tremenda irresponsabilidad, expuso Martins, quien la víspera anticipó el voto contrario al proyecto legislativo.
El señalamiento de la lideresa de izquierda es el más serio hacia el ejecutivo de Costa, quien afirmó este martes que no dimitiría.
En un mensaje más dirigido hacia los socialdemócratas, que se debaten entre la reelección de Rui Rio y del eurodiputado Paulo Rangel, Costa dijo que de haber comicios adelantados él será el candidato por los socialistas.
Sé que seré el líder de mi partido, pero si hay elecciones no saben quién será su líder, remarcó el primer ministro.
Poco antes el legislador socialdemócrata André Coelho Lima dijo que el gobierno recogió lo que sembró en su alianza con la izquierda.
El bloquista Jorge Costa preguntó a la bancada socialdemócrata si tenía un proyecto de país. La derecha nos trae lo de siempre, apuntó al referirse a los intentos de la tolda de privatizar la aerolínea bandera TAP (venderla a los alemanes).
Sin embargo, la diputada de Personas-Animales-Naturaleza (PAN) Bebiana Cunha admitió que podrían pasar de la abstención anunciada al voto favorable mañana en la generalidad (primera de dos lecturas).
En caso de esa eventualidad se sumarían cuatro papeletas a las 108 de los socialistas para un total de 112, todavía por debajo de los 115 que se anticipan en contra.
No obstante, el plan de presupuesto quedaría eliminado con los 10 votos de los comunistas, 19 del Bloque, 79 de los socialdemócratas, cinco del CDS-Partido Popular, y uno respectivo de Chega (Basta) y de Iniciativa Liberal.
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