El vicegeneral Soe Win, segundo al mando del ejército que tomó el poder hace siete meses, dijo que permitir que un extranjero acceda a alguien acusado de delitos es contra la ley nacional.
Win explicó en un discurso publicado en los medios estatales que «la estabilidad interna» estaba por encima de todo, en contraste con la creciente presión internacional para cumplir con un plan de paz regional acordado en abril.
En aquel momento, la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), de la cual forma parte Myanmar, acordó enviar al vicecanciller de Brunei para que evaluara la situación allí.
Para eso, el bloque regional pidió que se reuniera con los actores fundamentales del conflicto, incluida la exmandataria, pero el gobierno castrense quiere mantener a la ganadora del Premio Nobel de la Paz de 1991 completamente aislada.
La semana pasada, la Asean decidió excluir de su más reciente Cumbre al líder de la junta, Min Aung Hlaing, por no respetar el acuerdo de paz.
Sin embargo, este miércoles Win rechazó la acusación de incumplimiento y dijo que el acuerdo de abril dependía de que considerara los «asuntos internos actuales» de Myanmar.
La nación asiática vive en el caos desde febrero, y según un grupo de vigilancia local más de mil 200 civiles han muerto a manos de las fuerzas de seguridad.
mem/lp