Los avances hasta el momento son decepcionantes, y de cierta forma atemorizadores, aseveró el presidente del bloque, Sonam Wangdi, en una rueda de prensa con medios acreditados al evento organizado por el gobierno británico bajo los auspicios de Naciones Unidas.
Apuntó, por ejemplo, que el grupo integrado por 46 países con una población total de mil millones de personas, ha recibido muy poco de los 100 mil millones de dólares anuales prometidos una década atrás por las naciones ricas para enfrentar el cambio climático.
A pesar de ser esta la vigesimosexta ocasión en que se reúne la COP, las emisiones de gases de efecto invernadero siguen creciendo, y no tenemos claro qué ha sucedido con los 100 mil millones de dólares, pero sí sabemos que hemos recibido muy poco, remarcó el funcionario del gobierno butanés. Wangdi resaltó que tanto Bután como el resto de las naciones que integran el bloque son los que menos contribuyen al cambio climático, con apenas el uno por ciento de las emisiones globales, pero son los que más sufren de sus efectos.
Al respecto, comentó que su país, ubicado en las estribaciones de la cordillera del Himalaya, se encuentra a merced de las inundaciones provocadas por el derretimiento de los glaciales como resultado del calentamiento global.
Por lo tanto, dijo, nuestras vidas dependen de las decisiones que se tomen aquí en Glasgow, recalcó.
Interrogado sobre los anuncios hechos en el segmento de alto nivel de la COP26 por los líderes de las principales potencias mundiales para reducir las emisiones, detener la deforestación y limitar el calentamiento global a 1,5 grados, Wangdi dijo que las promesas deberían estar acompañadas por pruebas.
En su opinión, esos compromisos deberían llegar en forma de nuevas contribuciones determinadas a nivel nacional y estrategias a largo plazo que indiquen el camino hacia la neutralidad de carbono.
En el segmento de alto nivel de la COP26, que contó con la participación de alrededor de 120 jefes de Estado o gobierno, se anunciaron montos multimillonarios para frenar el cambio climático, hacer la transición hacia fuentes renovables de energía y ayudar a los países en vías de desarrollo a enfrentar el impacto de la crisis medioambiental.
El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, admitió, no obstante, que se sentía “cautelosamente optimista” sobre el éxito de la cumbre.
nm