Además de legalizar el consumo de placer de cannabis y despenalizar la posesión de hasta 28 gramos para consumo personal, las comisiones analizarán los alcances legales de la medida que provoca confrontación entre defensores y opositores de su uso, aunque sea terapéutico.
Las instancias de Justicia y de Salud de la cámara baja tienen listo para discutir y votar el dictamen para regularizar el uso lúdico y autorizar el cultivo en casa de hasta seis plantas para autoconsumo o hasta ocho en caso de que en la vivienda resida más de un consumidor.
Prevé, sin embargo, imponer una sanción de entre cinco y quince años de cárcel a quien, sin autorización, produzca, transporte, trafique, comercie o suministre cannabis, aun gratuitamente, cuando la cantidad sea superior a 5,6 kilogramos.
Con múltiples cambios al proyecto aprobado por el Senado, el dictamen de 461 páginas descarta la creación del Instituto Mexicano del Cannabis como órgano regulador y otorga a la Comisión Nacional contra las Adicciones la facultad de ejercer la rectoría sobre la cadena productiva del cannabis psicoactivo y su consumo.
En el articulado del dictamen se reconoce el derecho de las personas mayores de 18 años a consumir cannabis psicoactivo con fines recreativos, siempre y cuando se realice sin afectar a terceros, especialmente a menores de edad, y de ningún modo en lugares 100 por ciento libres de humo de tabaco.
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