“No le exigimos nada más que detener su interferencia en nuestros asuntos internos”, agregó Qassem, en una declaración remitida a Prensa Latina.
Respecto al tiroteo en Tayouneh-Ain al-Remmaneh, Qassem subrayó que Hizbulah y el movimiento Amal evitaron caer en la trampa que tendió el partido Fuerzas Libanesas.
Durante ese incidente, francotiradores dispararon contra una marcha de protesta contra el juez Tarek Bitar, a quien acusaban de politizar la pesquisa sobre la explosión en el puerto de Beirut el año pasado.
Al respecto, el vicejefe de la autodenominada Resistencia islámica demandó el ejercicio de un poder judicial justo, recto y transparente que no sea afectado por presiones de aquí o de allá.
En cuanto a las próximas elecciones parlamentarias, Qassem denunció que varios comenzaron a apuntar contra Hizbulah a fin de ganar dinero antes del ejercicio comicial.
La Resistencia libanesa apoya la realización de la consulta y aceptará la palabra y la opinión popular, puntualizó, al tiempo que condenó a quienes reciben dinero de Estados Unidos para hacer campaña hacia las elecciones.
mem/arc
