La fuente precisó que solo en la segunda semana de noviembre fueron eliminadas mil 565 minas por los expertos del proyecto Masam, financiado por Arabia Saudita.
Esos artefactos terrestres fueron plantados por la milicia huti en diferentes regiones del país, denunció.
La guerra en esta nación árabe estalló en 2014, cuando los rebeldes lanzaron una ofensiva desde el norte y ocuparon esta capital y amplias zonas del territorio nacional.
Un año después Arabia Saudita y aliados árabes intervinieron en la confrontación bélica en respaldo al presidente Abd Rabbu Mansour Hadi, cuyas fuerzas recuperaron algunas áreas, pero en los últimos meses perdieron terreno en los alrededores de la estratégica ciudad de Marib.
Según la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, dos tercios de la población yemenita, unos 20 millones de personas, dependen de la asistencia humanitaria y el 80 por ciento vive por debajo del umbral de pobreza.
Después de siete años de conflagración, esa nación tiene la cuarta población de desplazados internos más grande del mundo con unos cuatro millones, subrayó recientemente el organismo.
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