El mandatario alertó sobre los sobrevuelos cercanos a los límites jurisdiccionales de Rusia con decenas de aviones realizando prácticas de bombardeos y de un supuesto ataque nuclear, reportados en días recientes por el ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú.
“Si se están construyendo nuevas carreteras en las regiones adyacentes —algo que los militares saben bien— y realizan ejercicios de entrenamiento masivos con despliegue de tropas adicionales en nuestra frontera, y son decenas de miles, significa que hay algo detrás de eso”, manifestó el jefe de Estado belaruso según la agencia de noticias Belta.
Reunido con altos jefes militares en el Ministerio de Defensa de su país, Lukashenko advirtió que la situación en torno a Belarús no puede considerarse de forma independiente de lo que está sucediendo en la cuenca del mar Negro, de los problemas relacionados con Ucrania, Polonia y los países bálticos.
“Todavía no lo sabemos del todo, pero podemos imaginar la intención de nuestros oponentes. Hoy podemos decir directamente: nuestros enemigos”, manifestó el presidente.
Por su parte, el ministro belaruso de Defensa, Victor Jrenin, subrayó que, según las evaluaciones realizadas, las medidas de militarización de la región emprendidas por la OTAN provocan un cambio significativo en el equilibrio de fuerzas con un aumento evidente de su potencial ofensivo cerca de las fronteras del país.
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