En un acto de entrega del donativo, en presencia del embajador finlandés en Kenya, Pirkka Tapiola, el ministro federal de Educación, Cultura y Educación Superior somalí, Abdullahi Abukar Haji, manifestó que la subvención se administrará a través del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Abukar Haji, quien como funcionario es criticado por no fusionar el sistema federal educativo con el de algunos estados, sostuvo que con el fondo financiero donado por el país europeo podrán edificarse escuelas de enseñanza primaria.
Según organizaciones humanitarias, aún un elevado número de niños en edad escolar, sobre todo residentes en zonas rurales y provenientes de familias pobres, permanecen fuera del sistema educativo en Somalia, lo que limita su aprendizaje y desarrollo.
Tras aseverar que el acceso a la enseñanza es un derecho humano fundamental, Tapiola expresó que Helsinki está muy satisfecha de iniciar una asociación con Unicef en beneficio de los niños de esta nación del Cuerno de África.
Somalia deviene país inestable azotado por la violencia, donde predominan clanes y castas sociales, sin un gobierno central fuerte desde que en 1991 fuera derrocado el entonces presidente Mohamed Siad Barre.
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