“Yo no voy a pautar a la Convención respecto de lo que tiene que hacer, sino más bien a respetar e implementar lo que decida”, dijo.
Boric se reunió este martes durante más de tres horas con la presidenta de ese órgano, la académica mapuche Elisa Loncón, y con su vicepresidente, Jaime Bassa.
“Este es un tema de Estado, un tema de largo plazo. Si le va bien a la convención, le va bien a Chile”, expresó.
Avanzar hacia una nueva ley fundamental, en reemplazo de la vigente desde la época de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), fue una de las principales demandas durante el estallido social que estremeció al país en 2019.
“Que estemos escribiendo, por primera vez en nuestra historia republicana, una constitución de forma democrática, paritaria, con participación de los pueblos originarios que habitan nuestro territorio es un motivo de alegría y orgullo nacional y también mundial”, declaró Boric.
Añadió que no espera una «convención partisana», al servicio de su gobierno, ya que va más allá de la coyuntura política.
Para el mandatario electo, la reunión de esta jornada es una señal de compromiso con un proceso histórico.
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