Ayer la propia fuente oficial había registrado 261 mil 481 casos, después de reportar el miércoles 332 mil 252 y 271 mil 686 el martes, por lo que la media de infectados en los últimos cuatro días roza los 300 mil, una de las naciones más golpeadas del planeta.
Más temprano, la plataforma SI-DEP, que resume los resultados de las pruebas para detectar la Covid-19, reveló 409 mil 370 test positivos el lunes, casi cinco contagios por segundo.
Como vaticinaron expertos, el ritmo de hospitalización no marcha en suelo galo a la par de los casos, en sintonía con las características descritas de Ómicron, variante mucho más agresiva que su predecesora Delta en cuanto a la diseminación, pero también menos propensa a causar formas graves de la enfermedad.
En ese sentido, se encuentran ingresadas 21 mil 605 personas, 436 más que la víspera, y tres mil 815 pacientes reciben atención en cuidados intensivos (56 más).
Respecto a los decesos, Salud Pública Francia lamentó 193 en las últimas 24 horas, en un país con más de 125 mil víctimas fatales atribuidas a la pandemia desde marzo del 2020.
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