Blinken visitará Kiev y Berlín del 18 al 20 de enero de 2022, informó un comunicado de prensa del Departamento de Estado.
El viaje comenzará por la capital ucraniana, donde el jefe de la diplomacia estadounidense se reunirá mañana con el presidente de ese país de Europa del este, Volodymyr Zelensky, y con el ministro de Asuntos Exteriores, Dmytro Kuleba.
En su búsqueda de consenso con socios y aliados, Blinken se trasladará el 20 de enero a Berlín donde se reunirá con la ministra germana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, y a continuación sostendrá un encuentro con la Cuadrilateral Transatlántica (Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania).
Estados Unidos dice que reforzará su compromiso con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania ante un eventual ataque de Rusia, una acusación que desde hace meses realiza la Casa Blanca y que Moscú niega.
La semana pasada, el diario The New York Times reportó que Washington está considerando apoyar una insurgencia en Ucrania en caso de una invasión de Rusia.
Incluso algunos medios citan a expertos de inteligencia que hablan sobre un programa utilizado por la CIA para entrenar a paramilitares ucranianos.
Para los analistas las recientes conversaciones diplomáticas en Ginebra no lograron apaciguar las tensiones y pocos avances lograron.
El 21 de diciembre, el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, advirtió que 120 mercenarios estadounidenses recibieron entregas de armas químicas en las ciudades de Avdeevka y Krasny Liman, ocupadas por Ucrania.
Su objetivo -subrayó- era utilizar ese armamento en un eventual ataque de falsa bandera del que se podría culpar a Rusia.
En el actual escenario de escalada, el Kremlin sostiene que los acuerdos de Minsk de 2015 son la única base para resolver el conflicto interno en Ucrania.
Sin embargo, los puntos aprobados por las autoridades de Ucrania, Rusia, Francia y Alemania no los aplicó hasta ahora Kiev, negado a implementar su parte política.
mem/dfm