Según el Ministerio de Interior, alrededor de 38 mil ciudadanos se manifestaron este sábado, cifra inferior a los 54 mil estimados por la fuente oficial hace una semana, aunque los promotores de las movilizaciones en suelo galo siempre reportan una cantidad superior de participantes.
Las protestas dieron continuidad a las realizadas en los últimos meses, con la diferencia de que el pase de vacunación es ya un hecho, y entrará en vigor el lunes.
Lo anterior significará que para acceder a restaurantes, cines, museos, eventos, espectáculos, estadios y otros lugares, habrá que tener un esquema completo de inmunización contra la Covid-19.
En las 170 acciones cuantificadas hoy en todo el país en rechazo al documento que sustituirá al pase sanitario, los participantes acusaron al Gobierno de violar libertades individuales, de discriminar y de una alegado “apartheid” entre vacunados y no vacunados.
La intención del Ejecutivo es impulsar la inmunización, a la que se resistieron hasta ahora más de cinco millones de franceses, pese a los llamados a protegerse, en medio de una ola de contagios generada por la variante Ómicron del coronavirus SARS-CoV-2, con una media diaria superior a los 400 mil casos.
De acuerdo con encuestas, seis de cada 10 ciudadanos apoya el pase de vacunación, validado la víspera por el Consejo Constitucional, instancia a la que acudieron diputados y senadores de oposición, después de que la Asamblea Nacional lo aprobara.
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