En declaraciones a la cadena de televisión Rusia 24, la representante del Ministerio de Asuntos Exteriores de este país consideró la crisis actual en el este de Ucrania “un fenómeno vergonzoso para el continente europeo del siglo XXI”.
Recordó que repetidas veces Moscú pidió a los socios del llamado viejo continente que intensifiquen el trabajo en esa dirección y llamó la atención sobre el hecho de que el formato de Normandía se creó para tener una forma práctica de avanzar y no para celebrar reuniones protocolarias.
“Así que animen al Gobierno de Kiev a poner en práctica su parte de los compromisos y ese será el papel que deben desempeñar”, apuntó Zajárova, en referencia a la importancia del cumplimiento de los acuerdos de Minsk de 2015.
Expresó que “sin ese movimiento” surge la interrogante sobre cuánto se quiere avanzar “más allá de las palabras y hasta qué punto todos están realmente comprometidos con la aplicación de ese documento básico” para la solución pacífica del conflicto en Ucrania.
En una sesión informativa, también este miércoles, la jefa de prensa del servicio diplomático ruso dijo que Moscú ve posible alcanzar una desescalada en torno a Ucrania si Estados Unidos y la OTAN dejan de fortalecer las Fuerzas Armadas de Ucrania.
“Hay que detener las entregas de armas a Ucrania, retirar a los asesores e instructores militares occidentales de su territorio, acabar con las maniobras conjuntas de la OTAN y las Fuerzas Armadas de Ucrania”, puntualizó.
A la vez, reiteró los llamados de Moscú a los países de Occidente para que detengan la escalada artificial en torno a la situación Ucrania y a tomar medidas prácticas en el camino hacia la estabilización.
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