Convocada por la Federación Nacional Campesina (FNC) y la Coordinadora Nacional Campesina e Indígena, la movilización mantendrá los históricos reclamos del gremio sobre una añorada reforma agraria y cambios radicales al sistema sanitario.
Las demandas están centradas en la crisis del sistema de salud frente a la Covid-19, enfermedad que colapsó los hospitales del país y mantendrá altos picos de contagios y decesos en los próximos días.
‘Es urgente estudiar la situación sanitaria, porque resulta peligrosa para nosotros, al no existir proyecciones para darle solución’, declaró la líder gremial Esther Leiva.
No podemos pedir solidaridad a los otros países, hay que buscar más profesionales e instalar más terapias en todos los departamentos para poder salvar vidas, agregó.
Los campesinos e indígenas exigen la dimisión del gobierno del presidente Mario Abdo Benítez, al que acusan de corrupción y mal desempeño de sus funciones.
‘Nuestra consigna es fuera los corruptos, salud, tierra, trabajo y soberanía. El campesinado está totalmente abandonado de la política de Estado’, destacó la secretaria de la FNC, Teodolina Villalba.
Según la dirigente, esta gran marcha constituye la principal acción para la reivindicación de los derechos del sector agrario, considerado columna vertebral de la economía del país suramericano.
Los organizadores aseguran que las manifestaciones acontecerán en todos los departamentos del país y respetarán los protocolos de seguridad establecidos para evitar nuevos contagios del virus SARS-CoV-2, causante de la Covid-19.
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