En un artículo de opinión difundido en el diario Página 12 el catedrático y analista enfatizó que la experiencia demuestra que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) ha violado permanentemente lo establecido en el primer artículo de la Carta de Naciones Unidas sobre mantener la paz y la seguridad internacionales.
El texto titulado Rusia-Ucrania: Una tragedia evitable, hace referencia a las invasiones, bombardeos, golpes blandos, sanciones y bloqueos por parte de Estados Unidos a naciones como Yugoslavia, Libia, Iraq, Irán, Siria, Venezuela, Cuba, Afganistán y Ucrania.
Cita, por ejemplo, que ninguno de los gobiernos que hoy se rasgan las vestiduras ante el reconocimiento hecho por el presidente ruso Vladimir Putin de Donetsk y Lugansk emitió sonido alguno ante la carnicería que la OTAN practicó en los Balcanes.
Por otra parte, subraya también cómo, mientras con la aprobación de las “democracias europeas” Estados Unidos escalaba sus sanciones a Irán y profundizaba el criminal bloqueo a Cuba y Venezuela, proseguía con su aventura en Afganistán, cuyo mayor éxito fue lograr que el 85 por ciento de la producción mundial de opio se originara en ese país.
En el caso particular de Ucrania, el intelectual refirió que entre 2013-2014 el entonces presidente estadounidense, Barack Obama, propició, sin el menor tapujo, un golpe blando, destituyendo, apenas un año antes de las ya convocadas elecciones presidenciales, al gobierno de Víktor Yanukóvich.
«En su lugar impuso al empresario Petró Poroshenko y, posteriormente, al comediante y humorista Volodímir Zelenski, actualmente en el cargo. Todo, con el protagonismo excluyente de su subsecretaria de Estados para Asuntos Euroasiáticos, Victoria Nuland, la misma que rubricó su activismo diciendo al carajo la Unión Europea», enfatizó.
Al referirse a los hechos que llevaron a la situación actual, Borón precisó que si la OTAN estableciera en Ucrania sus misiles tendrían la capacidad de atacar ciudades como Moscú o San Petersburgo en cinco o siete minutos, y Putin consideró inaceptable esa amenaza a la seguridad nacional rusa.
Asimismo, consideró que «se ensañaron en un peligroso bullying con Putin y los resultados están a la vista. Una tragedia que podría haberse evitado y ante la cual no hay neutralidad posible. Hay un bando agresor: Estados Unidos y la OTAN, y otro agredido, Rusia. En esto no puede haber confusión alguna».
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