De concretarse este proceso podría hacer inviable la labor el Centro de Investigación de Energía Eléctrica (Cepel), desarrollador de herramientas y software para la administración de la red eléctrica nacional, en peligro de quedar sin recursos con el cese de inversión, reportó el portal Brasil de Fato.
Según comentó al medio el investigador y director de la Unión de Ingenieros del estado de Río de Janeiro, Agamenon Oliveira, el daño causado por la inviabilidad del Cepel sería enorme porque las empresas nacionales tendrían a futuro que comprar tecnología históricamente producida en el país.
También se perdería todo el conocimiento acumulado por los investigadores del centro, advirtió Oliveira.
Por su importancia, Eletrobras siempre aportó financiamiento a Cepel.
Este centro de investigación fue fundado en 1974 por dicha empresa estatal con el objetivo de reducir los gastos del país con la compra de tecnología extranjera y ayudar al desarrollo del sector eléctrico, que entonces experimentaba una gran expansión.
La ley de privatización de Eletrobras fue sancionada por Bolsonaro en julio del año pasado y prevé que la venta del control de la empresa se produzca después de la aprobación de la modificación de sus estatutos.
Este cambio debe asegurar que dicha compañía, bajo nueva administración, mantenga su participación en Cepel por seis años, pero después de eso no habría más obligaciones por parte de la empresa con el centro.
Por otro lado, las recientes privatizaciones de distribuidoras de electricidad en Brasil siempre han provocado altas tarifas y los apagones como efectos principales colaterales.
De concretarse la venta de Eletrobras, la factura eléctrica podría elevarse hasta en 16,7 por ciento en un primer momento y aumentar costos en la industria, para las familias y a toda la cadena productiva de la economía, según Brasil de fato.
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