El caso trata del presunto tráfico de influencias en la compra de aviones de combate Gripen, fabricados en Suecia, destinados a la Fuerza Aérea.
Tal pedido de suspensión fue realizado por la defensa de Lula, que criticó las acciones de la Lava Jato contra el exgobernante.
Advirtió que existió un plan para utilizar el derecho a atacar al fundador del Partido de los Trabajadores (PT) y a su defensa.
Los abogados del exmandatario utilizaron, en el recurso, mensajes filtrados del excoordinador de la Lava Jato Deltan Dallagnol, en los que «intenta construir una denuncia».
Esa acusación «involucra la adquisición de aviones de combate marca Saab/Gripen para equipar a las Fuerzas Armadas».
Otros mensajes validan la posición de la defensa de que, en ese momento, se estaban organizando grupos para denunciar falsamente al ex jefe de Estado.
Por los datos recogidos, Lewandowski, quien calificó de «graves vicios procesales», siguió la decisión de un juez del décimo Juzgado Penal Federal del Distrito Federal que accedió a la petición de los juristas del expresidente de «suspender cautelarmente la tramitación de la acción penal».
Lula fue condenado en dos casos de la Lava Jato que ahora quedaron anulados, como el del apartamento triplex de Guarujá, en el litoral de Sao Paulo, y el sitio de Atibaia, en el interior de ese estado.
Además se convirtió en acusado en un juicio que investiga un posible esquema de lavado de dinero en las donaciones al Instituto Lula.
Este proceso también fue suspendido momentáneamente por el Tribunal Regional Federal de la IV Región (TRF-4) en diciembre de 2020.
De acuerdo con la imputación del Ministerio Público Federal (MPF), el petista habría recibido millones de reales de la constructora Odebrecht, disfrazando las donaciones, entre diciembre de 2013 hasta marzo de 2014.
Tras recuperar sus derechos políticos, Lula encabeza actualmente todas las encuestas de opinión rumbo a las justas comiciales de octubre en las que espera reelegirse el presidente Jair Bolsonaro y llegar al poder el exjuez Sérgio Moro. Durante 2021, el líder del PT pudo recobrar su elegibilidad y registrar además 22 impresionantes victorias en el STF.
Según analistas, tales recompensas sacaron a la luz, una vez más, la orquestada cacería montada por grupos del MPF y la justicia para destruir a Lula como actor político, así como privarlo de sus derechos electorales.
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