Después de realizar entrevistas con actores económicos y productivos de ese ámbito en todo el mundo, la entidad financiera concluyó que la energía renovable sigue siendo una opción de diversificación atractiva donde las políticas en esa esfera son de apoyo.
La industria azucarera también ve oportunidades emergentes de mayor aprovechamiento de sus potencialidades de obtener nuevos rubros, en productos químicos renovables y bioplásticos.
Rabobank sostuvo que el alza cíclica de los precios mundiales del azúcar, las dudas sobre el crecimiento futuro del consumo de ese endulzante y el enfoque posterior a la Covid-19 y a la Cumbre COP26 en la sostenibilidad y las energías renovables, crean un caso convincente para la diversificación
Fundado en 1972 ese banco, de carácter multinacional, está presente en muchos países del mundo, pero está radicado principalmente en Países Bajos.
Expertos coinciden en que el sector, particularmente mediante el aprovechamiento del potencial de la caña de azúcar, puede aportar energía, alimento animal, tableros, papel, alcoholes y bebidas, sorbitol, fármacos, resinas, cera y otros numerosos rubros.
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