El gobierno ha decidido reabrir las fronteras del país luego de dos años. Creo que la gente lo ha esperado durante mucho tiempo. Este anuncio también impulsará la economía en general, y en particular la industria del turismo que se ha visto gravemente afectada por la pandemia, señaló.
Según los nuevos protocolos, los visitantes deberán someterse a pruebas previas a la salida (RT-PCR) y pruebas a la llegada (Antígeno bajo supervisión profesional) 24 horas después de la llegada.
En la actualidad, los visitantes pueden ingresar a la nación del sudeste asiático solo a través de la burbuja de viajes de Singapur y el destino turístico de Langkawi para los que están completamente vacunados.
Malasia cerró sus fronteras hace dos años, el 18 de marzo de 2020, cuando la pandemia de coronavirus se estaba extendiendo rápidamente por todo el mundo.
Si bien las mascarillas seguirán siendo obligatorias durante la fase de transición, Yaakob anunció en un discurso transmitido en vivo por varias cadenas de televisión nacionales una mayor relajación de las reglas a partir del 1 de abril.
Las personas no vacunadas podrán cruzar las fronteras estatales y ya no habrá límites en los horarios de apertura o en la capacidad de los locales comerciales y de restaurantes.
Malasia ha mantenido su economía abierta a pesar de la ola de Ómicron de la pandemia con un número de casos diarios que alcanzan niveles récord y hospitalizaciones en los últimos cinco meses.
El mandatario explicó que a pesar del alto número de casos (26 mil 856 nuevos el lunes), las categorías graves de Covid-19 que incluyen hospitalizaciones presentan cifras pequeñas.
Además, recordó que casi el 80 por ciento de la población total de Malasia ha recibido la vacuna completa, mientras que el 64 por ciento de los malayos tienen una dosis de refuerzo.
Durante el fin de semana, el primer ministro dijo que las fronteras se reabrirían pronto para permitir que la gente se reuniera durante las celebraciones religiosas de Hari Raya Aidilfitri en mayo.
De acuerdo con las nuevas normas, las oraciones en las mezquitas y el culto religioso en otros lugares no musulmanes también se pueden llevar a cabo sin distanciamiento físico.
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