Un avión de Fuerza Aérea Brasileña trajo a 42 connacionales y también a 20 ucranianos, cinco argentinos y un colombiano, además de 14 niños, ocho perros y dos gatos.
El canciller Carlos França estaba en una de las aeronaves y acompañó el viaje denominado Operación Repatriación. Cumplía una visita oficial en Polonia, donde se reunió con su homólogo polaco.
Poco después de aterrizar, Bolsonaro se dirigió al aparato para dar la bienvenida a los pasajeros. El primero en salir fue un hombre acompañado de tres niños.
En el vuelo de ida se transportaron 11,6 toneladas de donaciones a Ucrania, entre ellas unas nueve de alimentos deshidratados altamente nutritivos, equivalentes a unas 360 mil comidas; 50 purificadores de agua, con una capacidad de unos 300 mil litros de agua al día; media tonelada de suministros esenciales y artículos médicos.
Se enviaron unos 20 mil artículos médicos para la asistencia.
De acuerdo con el Gobierno, si resulta necesario en los próximos días podría coordinar un segundo viaje de repatriación.
La administración federal recientemente anunció que concederá visados humanitarios a ciudadanos ucranianos que emigran del conflicto armado en su país.
En una orden conjunta entre la cancillería y el Ministerio de Justicia, precisó que otorga «visa temporal y permiso de residencia con fines de acogida humanitaria».
Según el texto, tal autorización tendrá «una vigencia de 180 días» y el permiso de residencia es por dos años y también puede ser solicitado por ucranianos que residen en este país «independientemente de la condición migratoria» con la que ingresaron a territorio nacional.
Bolsonaro afirmó que Brasil continuará en la neutralidad respecto a las operaciones militares de Rusia en Ucrania.
«No vamos a tomar partido, vamos a continuar por la neutralidad y a ayudar en lo posible a la búsqueda de una solución», comentó el mandatario de tendencia ultraderechista.
Informó que el 16 de febrero conversó en Moscú con su homólogo ruso, Vladimir Putin, y que obviamente habló sobre Ucrania, pero el detalle lo «reservo como secreto».
Luego de la plática, el gobernante brasileño aseveró que su similar buscaba la paz y por ende Brasil era solidario con cualquier país que desee solucionar los conflictos de forma pacífica.
Rusia inició el 24 de febrero una operación militar en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL) solicitaran ayuda para repeler la agresión de Kiev.
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