De acuerdo con las autoridades policiales del estado, el incidente es calificado como un delito de motivación racial.
Los cinco menores, que cursaban entre el sexto y octavo grado en la escuela Lyons Creek Middle School, fueron detenidos por cargos de agresión y evidencia de prejuicio.
En la Florida, evidenciar prejuicios mientras se comete una ofensa se considera un delito de odio, explicó el Departamento de Policía de la comunidad Coconut Creek.
El incidente se produjo el miércoles por la mañana en el Complejo Recreativo de esa zona, a unos 70 kilómetros al norte de Miami y justo al frente de la escuela primaria, según los informes oficiales. De acuerdo con testigos, los estudiantes se acercaron a las víctimas, les gritaron «¡Poder marrón!» y les golpearon. Los informes de detención señalan que los comentarios se hicieron antes y durante la agresión.
Una de las víctimas se acercó llorando a un agente en el complejo recreativo, y dijo que le habían golpeado.
En 2020, Estados Unidos experimentó el mayor número de crímenes de odio registrados en 12 años, y las principales víctimas fueron las personas de raza negra, según datos del Buró Federal de Investigaciones.
rgh/age