Ubicado en la instalación de la antigua Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), el Museo es considerado un monumento histórico que reúne denuncias, pruebas y testimonios del terrorismo de Estado y los crímenes de lesa humanidad cometidos en este país en aquellos años.
Durante su visita, los mandatarios se reunieron con representantes de organizaciones defensoras de los derechos humanos y sobrevivientes del centro de tortura.
También asistieron al recorrido el ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Santiago Cafiero, y el titular de Justicia Martín Soria, entre otros funcionarios del Gobierno de esta nación.
Por la parte chilena estuvieron presentes la canciller Antonia Urrejola; la ministra de Defensa Nacional, Maya Fernández; de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana; y de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Julieta Brodsky.
Tras el recorrido, las delegaciones de ambos países dialogaron con familiares de desaparecidos y detenidos durante la dictadura e integrantes de las asociaciones de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, quienes obsequiaron a Boric el pañuelo blanco, símbolo de su lucha.
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