En inmediata reacción, la intendencia de Montevideo eliminó los controles y sanciones respecto a aforos y uso de mascarillas en espacios cerrados tales como ómnibus, bares, restaurantes, supermercados y comercios.
Sin embargo, exhortó a la población a llevar el mencionado aditamento protector individual y a la adopción de medidas de ventilación que permitan renovar el aire dentro de las unidades de forma de preservar las mejores condiciones posibles.
De igual modo, instó a recintos gastronómicos, ya sin horarios fijos de cierres, a mantener la colocación de mamparas, el alcohol en gel a disposición del público, la distancia interpersonal y el uso de la mascarilla por el personal.
Por su parte, el Ministerio de Educación reajustó de nuevo el protocolo sanitario para las escuelas de enseñanza primaria, de manera que dejó de considerarse brote la detección de dos casos positivos de la Covid-19 en una aula y, por lo tanto, se elimina la cuarentena general de cinco días.
Al referirse a estos cambios el catedrático de Enfermedades Infecciosas Julio Medina preguntó “si se alcanzó la madurez para respetar a quienes prefieran seguir usando mascarillas o no y para ser responsables y usarla cuando se tenga síntomas respiratorios y para no demandar un test si no es necesario”.
En tanto el epidemiólogo Juan Gil advirtió que en la circulación del virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad “no hay final” y todavía no se puede hablar de una fase de endemia.
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