En declaraciones a Prensa Latina en esta capital, el diplomático precisó que su país labora en propuestas tanto individuales como colectivas, en este último caso enfocado en un proyecto conjunto con República Dominicana, Brasil, Cuba y Haití relacionado con las virtudes del casabe.
Se trata de un producto multinacional a base de yuca, heredado de pueblos originarios del continente, sobre todo en zonas del Caribe, y su promoción como elemento del patrimonio inmaterial busca reconocer –señaló- su aporte a la solidaridad humana.
De acuerdo con Valero, en los próximos días la Unesco acogerá una reunión sobre el tema, en la cual propondrá a Venezuela para ser sede del encuentro de los coordinadores de la iniciativa de exaltar al Casabe.
También estamos enfrascados a título nacional en la presentación del expediente sobre el Baile del Joropo, una expresión musical y dancística diseminada por nuestra geografía, aunque con mayor fuerza en los territorios llaneros, añadió el experimentado embajador, quien en el pasado encabezó las misiones de su país ante la ONU y el Consejo de Derechos Humanos.
El delegado permanente comentó que la intención es presentar el año próximo los expedientes del Casabe y del Baile del Joropo.
Otro proyecto, pero para más adelante, se vincula con el objetivo de incorporar al patrimonio cultural inmaterial de la humanidad al Culto a San Benito, una tradición afro-venezolana asentada en torno al Lago de Maracaibo, la cual data del siglo XVI y con origen en las cofradías coloniales, en particular los franciscanos, expuso.
Valero destacó en su diálogo con Prensa Latina el rigor con el que se trabaja para satisfacer los requisitos de la Unesco e insistió en el papel central que la Revolución Bolivariana otorga a la cultura en sus más diversas expresiones.
Con la incorporación a la lista del patrimonio cultural inmaterial a finales del año pasado del Culto a San Juan Bautista, Venezuela cuenta con ocho elementos inscritos, entre ellos los Diablos del Corpus Christi, la Parranda de San Pedro de Guarenas y Guatire, el Carnaval del Callao y la Salvaguardia de la Tradición de la Palma Bendita.
El embajador resaltó además las gestiones para presentar en cuanto al patrimonio material a Puerto Cabello y su casco histórico y al Castillo de San Felipe.
En este castillo se refugiaron los reductos del derrotado ejército colonial español después de la batalla de Carabobo (1821), por lo que tiene el gran valor histórico de consolidar la victoria de nuestra gesta independentista, subrayó.
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