Dos años tomó la sistematización de la pesquisa por un equipo de especialistas para su presentación ante magistrados, con la participación de familiares de las víctimas.
Al frente de ese trabajo, el profesor Hugo Rodríguez expuso que se desarrolló la técnica denominada “autopsia histórica”, en la cual la información normalmente obtenida directamente del cadáver se sustituye por la que se encuentra disponible en los documentos oficiales sobre esa muerte.
El equipo a su cargo acumula experiencia en este campo por la producción de numerosos informes forenses solicitados por la Institución Nacional de Derechos Humanos o realizados en conjunto con el Poder Judicial.
Los investigadores tomaron como referencia a quienes sufrieron la violación a su integridad psicofísica y a su libertad dentro y fuera del territorio nacional, desde el 27 de junio de 1973 hasta el 28 de febrero de 1985, por motivos políticos, ideológicos o gremiales.
De 108 muertes bajo custodia, los investigadores determinaron que 36 fallecieron en centros de detención clandestinos o irregulares, 34 en un centro de detención regular; 19 son personas que continúan como detenidas desaparecidas y 19 fallecieron en operativos de detención o represión en la vía pública.
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