En el cónclave, según divulgó en horas recientes la Organización Mundial de la Salud (OMS), se discutirán las estrategias globales sobre seguridad alimentaria, y acerca de la investigación en materia de tuberculosis.
Ocuparán espacios en el programa, asimismo, debates en torno al fortalecimiento de la preparación y la respuesta a las emergencias sanitarias, y en relación al diseño de una hoja de ruta para la aplicación, en el periodo 2023-2030, del plan de acción global para la prevención y el control de las enfermedades no transmisibles.
Otros objetivos de la cita estriban en la concreción de un proyecto intersectorial sobre la epilepsia y otros trastornos neurológicos en el lapso de 2022 a 2031, y también se hará referencia a diversos padecimientos como la poliomielitis.
Algunos de sus encuentros versarán además sobre la prevención de la explotación, el abuso y el acoso sexuales; y otros en pos del establecimiento de una Iniciativa mundial de salud para la paz.
Para esta jornada de la reunión se prevé un segmento de alto nivel en el que intervendrán el presidente electo de la Asamblea, los jefes de Estado, los invitados especiales, y un discurso del líder de la OMS, con la exposición de las cinco prioridades de la entidad para el futuro.
Con anterioridad al inicio del evento, el organismo internacional divulgó un informe titulado Estadísticas Sanitarias Mundiales, en el que se alerta acerca de cómo las restricciones a los servicios sanitarios provocadas por la Covid-19 atentan contra el progreso global logrado en la esperanza de vida en los primeros 20 años del siglo.
Añadió que la pandemia provocó interrupciones en el cuidado de rutina con peligrosos efectos sobre la capacidad de los países para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la salud hasta 2030.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom, recalcó por su parte que la contingencia ocasionada por el SARS-CoV-2 dejó al descubierto las desigualdades dentro de los países y entre ellos.
«La recuperación sostenida requerirá algo más que retomar el camino y reinvertir en los servicios y sistemas existentes. Necesitamos un enfoque nuevo, lo que significa cambiar las prioridades y centrarse en las intervenciones de mayor impacto», sentenció.
La convocatoria de este año para la Asamblea, en cuya agenda se incluye la elección del próximo director general de la OMS, se centrará en el tema «Salud para la paz, paz para la salud» y se celebrará hasta el 28 de mayo en el Palacio de las Naciones de Ginebra.
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