«Tenemos que devolver al pueblo brasileño el derecho a sonreír, el derecho a comer, el derecho a estudiar, el derecho a la fraternidad y de la solidaridad, el derecho a volver a ser humanista y no algoritmo, como quieren que la gente sea», señaló Lula durante un encuentro con profesionales y especialistas del área de educación en Porto Alegre, capital estadual.
Insistió en que «tenemos la obligación de devolver al pueblo brasileño el derecho a soñar, de creer que ese país con 8,5 millones de kilómetros cuadrados, 215 millones de habitantes y 520 años de historia no puede seguir siendo pobre, no puede seguir hambriento, no puede continuar analfabeto, no puede continuar muriendo de desnutrición».
También el fundador del Partido de los Trabajadores valoró la dupla con el exgobernador de Sao Paulo Geraldo Alckmin para disputar las elecciones de octubre, pues la alianza en torno a su candidatura es para unir la decencia del país y a quienes valoricen el amor en vez del odio, y «saben que un libro vale mucho más que una pistola».
En víspera de su visita a la división territorial, Lula defendió, en entrevista concedida a Radio Bandeirantes, el rescate de la soberanía nacional para que Brasil vuelva a crecer económicamente y la vida de la población pueda mejorar.
De acuerdo con el exdirigente sindical, resulta política del gobierno del mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro desmantelar las empresas públicas y debilitar el Estado, y colocar al país en la situación actual, con hambre, inflación y desempleo.
Ejemplo de esto, agregó, es lo que ocurre con la empresa petrolera estatal de economía mixta Petrobras, que la actual administración insiste en vender.
«El presidente de Petrobrás está subordinado a las orientaciones políticas del Estado brasileño. Aunque la gente no tiene la mayoría de las acciones, el Gobierno indica el consejo y el titular (de la compañía) es indicado por la junta», recordó Lula.
De esta manera el líder petista mostró que Bolsonaro miente cuando dice que no es el responsable del alto precio de los combustibles.
En otra parte de la entrevista, Lula señaló que soberanía y desarrollo son inseparables, y solo un Estado fuerte y comprometido con la calidad de vida de la población hace las inversiones necesarias para que el país crezca y la vida del pueblo mejore.
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