“Esta reunión de Los Ángeles no puede ser catalogada ni de Cumbre, ni de las Américas, porque el anfitrión se arrogó el derecho de excluir a tres países de nuestra región”, subrayó Llorenti en entrevista concedida al portal Venezuela News.
En tal sentido, el titular de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), señaló que la exclusión de Venezuela, Cuba y Nicaragua es una decisión arbitraria y políticamente motivada, que marcó el fracaso de la cita antes de su inicio.
Esta situación exaltó a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) como el espacio privilegiado de la integración regional, aseveró el secretario del ALBA-TCP.
Asimismo –agregó-, desató tempranamente una suerte de “rebelión” de varios gobiernos, presidentes y organismos de la región; “algunos países no van porque están protestando airadamente, y muchos de los que van están yendo a protestar”, insistió Llorenti.
El titular del mecanismo de integración lamentó además que en la fallida reunión de Los Ángeles se haya perdido una oportunidad de conversar sobre los desafíos regionales y globales.
Sacha Llorenti advirtió que a Estados Unidos no le interesa la integración de la región, ni la democracia, ni los derechos humanos; “son solamente discursos para imponer su agenda e instrumentalizar cualquier escenario para sus fines hegemónicos”, aseguró.
Durante la XXI Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno, celebrada el 27 de mayo último en La Habana, el ALBA-TCP condenó el trato discriminatorio de Estados Unidos hacia Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Los países del bloque integracionista consideraron la exclusión unilateral de esas naciones como un grave retroceso histórico en las relaciones hemisféricas que ofende a los pueblos latinoamericanos y caribeños.
Asimismo, destacaron la valiente posición de gobiernos, actores sociales, organizaciones y pueblos que han rechazado de diversas formas, las exclusiones de la reunión de Los Ángeles.
En la declaración final de la reunión de alto nivel, la Alianza ratificó su compromiso con la integración y la unión de los pueblos de la región, a tono con los principios de solidaridad, justicia social, cooperación y complementariedad económica.
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