Tras un encuentro trilateral entre Marcelo Ebrard, canciller de México, Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, y la ministra de Asuntos Globales de Canadá, Mélanie Joly, dichos funcionarios firmaron un comunicado conjunto en el que asumen esa responsabilidad.
Los tres reafirman en el texto el compromiso de abordar las causas fundamentales de la migración irregular y la pobreza y de invertir en la región, priorizando la cooperación para el desarrollo con el fin de crear oportunidades económicas para todos.
Reconocemos que abordar la migración irregular en la región requiere un enfoque coordinado, y apoyamos la Conferencia Regional sobre Migración, el Marco Integral Regional para Protección y Soluciones y la visión del Pacto Mundial sobre Migración, señalan.
Se comprometen a cooperar para apoyar y fortalecer el proceso democrático de Haití, y promover un camino político inclusivo y dirigido por haitianos. También estamos comprometidos a trabajar en estrecha colaboración con las Naciones Unidas y otros socios regionales para promover un crecimiento pacífico, justo y sostenible en todo el hemisferio, añaden.
Admiten la necesidad de tomar medidas audaces, rápidas y coordinadas para abordar la crisis climática. El cambio climático amenaza nuestras economías y nuestras comunidades, especialmente aquellas que son vulnerables y desatendidas, expresan.
Finalmente reconocen el lugar integral de los pueblos indígenas en América del Norte y sus contribuciones a la riqueza de nuestra cultura y sociedad, y que la diversidad cultural y la pluralidad lingüística son parte del patrimonio de la humanidad, por lo que otorgamos gran valor al legado histórico de las comunidades aborígenes de la región. El documento expresa que los tres funcionarios también discutieron la planificación de la próxima Cumbre de Líderes de América del Norte en México en diciembre.
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