Según la Oficina Presidencial, el mandatario libanés enfatizó que está fuera de discusión renunciar a los derechos del país y así lo manifestarán al mediador estadounidense Amos Hochstein, quien llegará esta jornada a Beirut para retomar las conversaciones.
Al recibir a una delegación parlamentaria, Aoun subrayó que las negociaciones indirectas con Israel quedaron paralizadas luego del rechazo a la propuesta libanesa considerando la línea trazada por la Autoridad Hidrográfica del Ejército, conocida como Línea 29.
El presidente de la República expresó esperanza de que las conversaciones con el diplomático Hochstein hagan avanzar las negociaciones y mencionó las presiones que enfrenta Líbano para evitar invertir en su riqueza hídrica.
Aoun indicó que está al frente de las negociaciones y luego de llegar a un acuerdo, el Consejo de Ministros debe aprobarlo y remitirlo al Parlamento de acuerdo a las reglas.
Reafirmó la condena de Líbano a las amenazas de Israel que actúa en contravención de las leyes y resoluciones internacionales, “aprovechándose del silencio de la comunidad internacional”.
El grupo de parlamentarios lo integraron Melhem Khalaf, Ibrahim Mneimneh, Ramy Feng, Mark Daou, Waddah Sad ek, Yassin Yassin y Najat Aoun, quienes manifestaron su repudio a la entrada de la plataforma griega al servicio de Israel en el disputado campo de Karish.
La tensión entre los dos países aumentó los últimos ocho días cuando un barco de la unidad de producción Energean Power al servicio de Israel llegó al campo de gas de Karish, ubicado en la zona sur entre Líbano y Palestina ocupada.
El secretario General de Hizbulah (Partido de Dios), Hassan Nasrallah, reiteró las capacidades financieras, militares y de seguridad de la resistencia para evitar la exploración de las riquezas de Líbano por parte de Israel.
Llamó a las máximas figuras del Estado, el Parlamento y el gobierno a unificar la posición oficial, pues aseguró que en este enfrentamiento contra Israel la nación de los cedros posee el derecho, el motivo, la máxima necesidad y la fuerza bajo el título de ejército y resistencia.
Líbano e Israel no tienen relaciones diplomáticas y desde el conflicto de 2006 fuerzas de Naciones Unidas mantienen la tranquilidad en la frontera común en el sur.
En cuanto a los límites marítimos, ambas naciones reanudaron los diálogos en 2020, pero el proceso quedó en pausa tras la solicitud de funcionarios libaneses de actualizar el mapa utilizado por las Naciones Unidas en las conversaciones.
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