La agrupación lleva el nombre de quien es reconocido como el creador del danzón, el baile nacional de Cuba, nacido en 1852 en esta occidental ciudad donde falleció en 1921, y fundada hace nueve años un 14 de abril por su tataranieto Ethiel Fernández Failde.
Este aniversario trasciende el hecho artístico para insertarse en el rescate de los géneros musicales de la isla, sobre todo con la visión contemporánea danzonera, para proyectarlos sobre todo a los jóvenes, al decir de especialistas en la materia.
La musicóloga matancera María Victoria Oliver aseguró aquí que La Failde, como es conocida popularmente, ‘marca un hito en el desarrollo del danzón y la recontextualización de este género de la música bailable cubana en estos momentos de la historia del país’.
‘El danzón ha tenido instantes de mayor relevancia, otros en que se ha visto necesitado de fusionarse con ritmos como el danzonete y el mambo, pero Ethiel asume con profesionalidad al tomar obras, incluso inéditas, para llevarlos a escenarios nacionales y del mundo’, apuntó.
Oliver consideró a Joyas inéditas como un hecho relevante al respetar la estructura y la instrumentación anterior en la sonoridad de un colectivo musical del siglo XXI, ‘lo cual demuestra un trabajo serio y riguroso’.
‘Ethiel y su orquesta generan composiciones con presencia de figuras importantes de la isla para actualizar el género, con criterios musicológicos e historiográficos’, expresó.
La especialista citó piezas donde se fusiona en variados ritmos con Omara Portuondo, la diva del Buena Vista Social Club, o con el pianista Alejandro Falcón y el jazz, que constituyen renovaciones del compás emblema nacional.
La trascendencia de la joven Orquesta, opinó la comunicadora María Elena Bayón, valoriza celebrar el noveno aniversario de su primera presentación ante el público matancero, al rebasar los marcos del país para extenderse a México, Francia y Estados Unidos, entre otras naciones.
‘Para nuestro orgullo constituye una de las principales exponentes de esa genuina música cubana que rompe fronteras y se adentra en el corazón de los pueblos’, enfatizó.
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