Ese último día se cumplirán 20 años de los ataques contra las Torres Gemelas de Nueva York y otros sitios norteamericanos, que llevaron a Washington a desatar lo que denominó su guerra contra el terrorismo.
Biden, cuyo plan al respecto fue adelantado la víspera por un alto funcionario que pidió el anonimato, expuso en un discurso en la Casa Blanca que es hora de poner fin a la contienda bélica más larga de Estados Unidos con casi dos décadas de duración.
De acuerdo con el mandatario demócrata, la retirada se realizará sin apresuramientos, de manera responsable y en coordinación con los aliados de su país.
Por otra parte, el gobernante norteamericano subrayó que responderá con todas las herramientas a su alcance a cualquier ataque de los talibanes, que instaron a Washington a salir de Afganistán antes del 1 de mayo como prometió Donald Trump, el antecesor de Biden.
También comentó que esta guerra, con saldo de unos dos mil 300 norteamericanos muertos, logró evitar que la nación asiática se utilizara como base desde la cual agredir nuevamente a Estados Unidos.
Logramos ese objetivo, dije que seguiríamos a Osama bin Laden hasta las puertas del infierno si fuera necesario y eso fue exactamente lo que hicimos, agregó.
De esa forma, Biden recordó su etapa como vicepresidente en el mandato de Barack Obama (2009-2017), quien no cumplió su promesa de retirar las tropas estadounidenses de suelo afgano.
Nuestras razones para permanecer en Afganistán se vuelven cada vez más confusas, incluso a medida que evolucionó la amenaza terrorista contra la que fuimos a combatir, admitió el jefe de Estado.
Según datos oficiales, Estados Unidos tiene en la actualidad tres mil 500 efectivos en Afganistán, y la criticada Organización del Tratado del Atlántico Norte, que también anunció hoy la retirada desde el 1 de mayo, y socios de Washington mantienen a otros siete mil soldados.
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