Ante el colapso de las Unidades de Terapia Intensiva y la gran cantidad de casos graves ingresados a diario con el virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad, la doctora aseguró que solo el 10 por ciento de los fallecidos pudo acceder a una cama y la mayoría muere en los pasillos o en salas de internación común.
El personal de la salud trabaja sumamente desprotegido y los insumos recibidos son de mala calidad, denunció, al tiempo que –agregó- son pocos los galenos disponibles y la cartera encargada no contrata a más personal, pese a la existencia de al menos tres mil 600 sin trabajo.
Reveló que realizan los reclamos directamente a los viceministros de Salud, pero reciben como respuesta el silencio. ‘No hacen caso’, declaró.
La situación es muy penosa porque estamos en permanente riesgo de volver a contraer la Covid-19, mientras una segunda infección ya puede ser un poco más grave cuando la vacunación se hizo en forma tardía y dudamos estemos protegidos, señaló.
En ese sentido, recordó que en lo corrido de la situación epidemiológica perdieron la vida 42 médicos y 50 enfermeras ‘de alto nivel científico y con una potencialidad enorme para el país’.
De acuerdo con el último reporte estadístico, Paraguay registró en total cinco mil 110 muertes desde el inicio de la pandemia, crifra disparada desde diciembre y a partir del mes de febrero con una curva aún más preocupante.
Como consecuencia del impacto de la Covid-19, miles de paraguayos salieron a las calles en esta capital y otras ciudades durante más de una semana a mediados de marzo para exigir la dimisión del mandatario y su vicepresidente, Hugo Velázquez.
Las movilizaciones, concentradas mayormente frente a la Cámara de Diputados con carteles con palabras como corrupción y consignas pidiendo que se vayan todos los corruptos y mafiosos, causaron un muerto y decenas de heridos y detenidos.
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