Kitazumi fue arrestado mientras el ejército registraba minuciosamente las zonas residenciales para detener a personas relacionadas con las protestas contra el golpe militar.
El periodista, de 45 años, fue detenido en su casa en Yangon, la ciudad más poblada de Myanmar, y se cree que fue trasladado a la prisión de Insein, aunque la misión japonesa en Naiyipdó desconoce los cargos en su contra y su estado de salud.
El primer ministro Yoshihide Suga dijo este lunes que su gobierno hará todo lo que esté a su alcance para proteger a los ciudadanos nipones en Myanmar.
Las autoridades japonesas pidieron a sus homólogas de Myanmar que liberen a Kitazumi, dijo el secretario jefe del gabinete, Katsunobu Kato, en una conferencia de prensa.
Kitazumi, un exreportero de un periódico de negocios Nikkei, comenzó a cubrir las protestas contra el ejército de Myanmar inmediatamente después del golpe de estado del 1 de febrero pasado.
mem/gfa