En declaraciones este martes en el Parlamento, el jefe de la diplomacia británica aseguró que el encuentro se desarrollará entre el 3 y el 5 de mayo bajo estrictas medidas de distanciamiento social para evitar la propagación del coronavirus SARS-CoV-2 causante de la Covid-19.
De acuerdo con Raab, todos los participantes en la reunión de las siete economías más desarrolladas del mundo occidental tendrán que someterse a pruebas diagnósticos diarias para detectar algún eventual contagio.
El evento, que servirá de antesala a la cumbre de líderes del G7 prevista para celebrarse en junio también de forma presencial en un balneario de Cornualles, en el sur de Inglaterra, será una oportunidad crucial para revitalizar los contactos personales tras un año de pandemia.
Entre los temas a abordar estarán el acceso equitativo a las vacunas, las metas globales para la educación de las niñas, el financiamiento de la lucha contra el cambio climático y medidas para evitar el hambre y la inseguridad alimentaria, adelantó la cancillería británica.
Además de los ministros de Relaciones Exteriores de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Estados Unidos y el Reino Unido, y de un representante de la Unión Europea, Raab también invitó a sus homólogos de Australia, Corea del Sur y Sudáfrica, y al secretario general de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático.
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