El gremio denunció en un comunicado el arresto ayer del periodista Nidal Abu Akar, unos tres meses después de su liberación de la última detención administrativa durante la cual pasó dos años en cautiverio.
También rechazó la decisión de la vecina nación de aplicar al reportero Amer Abu Arafa ese procedimiento por un período de cuatro meses.
La llamada detención administrativa es utilizada por Israel para arrestar a palestinos por intervalos renovables que suelen oscilar de tres a seis meses sobre la base de pruebas no divulgadas que incluso el abogado del acusado tiene prohibido ver.
Los palestinos y los grupos de derechos humanos denuncian que viola el debido proceso judicial porque permite no presentar pruebas contra los presos mientras permanecen detenidos durante largos períodos sin ser acusados, juzgados o condenados.
El sindicato también cuestionó la decisión de Tel Aviv de impedir sendos viajes al extranjero a los periodistas Majdoleen Hassouna y Mujahid Al-Saadi, este último para brindar su testimonio sobre las circunstancias del reciente asesinato por balas israelíes de la comunicadora Shireen Abu Aqleh.
La agencia oficial de noticias Wafa reveló la víspera que las fuerzas de seguridad israelíes cometieron al menos 21 violaciones contra los trabajadores de ese sector el pasado mes.
Entre ellos citó casos de disparos mientras cubrían noticias en desarrollo en Cisjordania, en especial ataques de los colonos israelíes contra civiles palestinos.
En lo que va de año los militares mataron a dos comunicadoras palestinas, Abu Aqleh, por un disparo en la cabeza en el campamento de refugiados de Jenin, norte de Cisjordania, y Ghofran Warasnah, cerca de la sureña ciudad de Hebrón.
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