El análisis se da en la denominada mesa cero o de coordinación, donde los participantes, junto a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, en calidad de mediadora, establecen las pautas para las conversaciones, iniciadas el pasado 13 de julio.
La reunión de esta jornada revisa además los avances hasta el momento, en tres mesas técnicas, las cuales tienen propuestas, pero sin concreciones.
«El tiempo está pasando y la pregunta es, ¿será que vamos a avanzar en los 90 días y culminar con los 10 puntos? Eso nos preocupa como movimiento indígena», advirtió en declaraciones a la prensa Samuel Lema, representante del Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador.
Por su parte, Mariana Yumbay, técnico de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador adelantó que propondrán algunas alternativas para avanzar lo más pronto posible.
«El tiempo es apremiante y el pueblo ecuatoriano quiere respuestas inmediatas, que puedan resolver la vida de todos», enfatizó.
La idea es establecer un itinerario durante esta jornada, hacia reuniones más concretas y soluciones a la agenda de 10 puntos establecida al inicio de las negociaciones, que en 10 días cumplirán un mes.
Desde la Conferencia Episcopal, el secretario del ente, David de la Torre, acotó: «no hay soluciones mágicas, hay que irlas construyendo, una parte desde lo posible, pero también desde la vida concreta de la gente».
Independientemente de los ajustes previstos a partir de hoy, para la próxima semana están fijadas reuniones relacionadas con asuntos pendientes como los subsidios focalizados a los combustibles y el control de precios y la especulación.
En cuanto al último tema mencionado, el movimiento indígena, en representación de todos los sectores populares que estuvieron en el paro nacional efectuado del 13 al 30 de junio último, presentó una lista de 44 productos.
Sin embargo, desde el Ejecutivo, solo hay respuesta para 13, que representan el 30 por ciento de la lista, con lo cual la contraparte no está de acuerdo.
En ese particular, el Gobierno se comprometió a dar respuestas a más tardar el viernes de esta semana.
Inicialmente, quedó establecido que el diálogo duraría 90 días, entre evaluaciones y soluciones definitivas, pero teniendo en cuenta el paso lento de las conversaciones, podría extenderse.
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