En prisión provisional desde el pasado fin de semana por un supuesto caso de lavado de dinero, la captura de Zamora disparó las críticas al gobierno de Alejandro Giammattei no solo de organizaciones y medios de prensa nacionales, sino también internacionales, que reclaman la libertad del destacado periodista y el cese de la criminalización.
Hasta el miércoles último bajo reserva, la audiencia de primera declaración prevista para el lunes último se suspendió por problemas burocráticos, pero dos días después tomó un giro inesperado porque el Ministerio Público (MP) reveló que los abogados de la defensa también estarían acusados.
Ante la nueva situación, Zamora pidió aplazar la vista para el lunes próximo no sin antes reiterar que se trata de un montaje para amordazar a elPeriódico por su denuncia constante contra el Ejecutivo.
Desde su detención, organizaciones de defensa de los derechos humanos y personalidades en el mundo denuncian lo que consideran otro golpe más a la libertad de expresión por parte de Giammattei y en redes sociales se mantuvo como tendencia toda la semana la etiqueta #NoNosCallarán en rechazo a la actuación del MP.
«Está capturado como empresario, no como periodista», según la Fiscalía; sin embargo, pocos creen aquí ese argumento, después de la publicación en la sección El Peladero de elPeriódico de «La fábula del ogro y el principito azul que lo quería todo», en referencia directa al gobernante y la corrupción imperante bajo su mandato.
En un comunicado, la Conferencia Episcopal de Guatemala expresó su preocupación ante «un hecho en que, independientemente de las razones planteadas, se termina atacando de facto la libertad de prensa en el país y se genera un ambiente de zozobra y miedo en los medios de comunicación social».
También la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, se pronunció nuevamente sobre la violación de derechos fundamentales no solo de Zamora, sino del personal del medio, el cual fue retenido 10 horas mientras se ejecutaba el allanamiento de la sede.
Menchú llamó a la ciudadanía a cerrar filas en contra de la criminalización, persecución y represión de las voces críticas por afectar no solo a la prensa sino también a operadores de justicia.
Asimismo, la Asociación de Periodistas de Guatemala emitió un comunicado para denunciar el embargo de cuentas del diario, lo cual, dijeron, ratifica que el objetivo es su cierre.
En este ambiente convulso, el pasado jueves diversas organizaciones y movimientos sociales convocaron a una jornada de movilizaciones el martes y jueves próximo contra la corrupción, la impunidad y la cooptación del Estado.
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