Deben admitirlo, pues es un hecho, cuando se tomó una decisión política de limpieza étnica, el asesinato de toda la minoría nacional que vivía allí durante siglos, lo cual fue un genocidio, aseveró el ministro polaco, citado por la televisión.
Durante la Segunda Guerra Mundial, en febrero de 1943, los nacionalistas ucranianos lanzaron una acción para exterminar a la población polaca de Volinia.
Las operaciones punitivas alcanzaron su clímax el 11 de julio de 1943, cuando los destacamentos nazis ucranianos atacaron unos 100 asentamientos polacos, donde las víctimas fueron principalmente mujeres, niños y ancianos.
Según Sellin, Polonia y Ucrania tienen la intención de crear un grupo de trabajo conjunto para buscar fosas comunes, exhumar los restos, crear cementerios y erigir monumentos.
De acuerdo con él, la parte polaca ya confirmó la composición del grupo y la transfirió al ministerio de Cultura en Kiev, y ahora espera propuestas de la parte ucraniana.
El ministro polaco aseguró, que en la sociedad ucraniana existe una falta de conocimiento completo sobre las actividades de las organizaciones nacionalistas del país.
Tarde o temprano, los ucranianos comenzarán a comprender que algunas de las tradiciones de estas formaciones y los movimientos políticos nacionalistas detrás de ellos son inaceptables y merecedores de condena, ratificó el funcionario.
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