“El tiempo está pasando mi paciencia se está acabando y no van a contar con mi apoyo”, dijo un furibundo Pierluisi mostró su malestar al consorcio privatizador de la estatal Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
La poco habitual reacción del gobernante puertorriqueño se produjo en medio del malestar generalizado por los constantes apagones que se suceden en el país desde que la empresa norteamericana está en control de la distribución y transmisión de la energía de la AEE.
Reveló que estuvo en comunicación telefónica con los ejecutivos de las compañías matrices de LUMA Energy, con el propósito de exigir cambios que permitan sortear la crisis, entre estos el aparente relevo del CEO Wayne Stensby.
“He pedido que se cambie el plan de ejecución, que se mejore el desempeño de LUMA particularmente en el área de las interrupciones mayores y la duración; he sido bien puntual en las cosas que quiero que cambien y estoy en espera de esos cambios”, apuntó molesto.
Por primera vez en poco más de un año, Pierluisi sintonizó con el pueblo puertorriqueño al decir que “no estoy satisfecho con el desempeño y voy a ir más allá, LUMA no va a contar con mi apoyo como gobernador a menos que se den los cambios que he pedido”.
Se espera que a partir de este miércoles se anuncie un proceso de ingeniería en la estructura gerencial del consorcio, que participa del festín de millones de dólares del presupuesto de la AEE sin haber aportado un centavo y sin cumplir con las tareas esenciales.
También se esperan cambios en la dirección del organismo de las Alianzas Público-Privadas, luego que su director Fermín Fontanés dejara evidenciado en una entrevista radial que atiende las obligaciones que le corresponden con la privatizadora.
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