Excepto de Cerdeña, que permanece en zona roja; y Basilicata, Calabria, Apulia, Sicilia y valle D’Aosta que pasaron a naranja, las 14 regiones restante están en amarillo, lo cual muestra el grado de contagio y la gradualidad de las medidas para frenar la epidemia de la Covid-19.
La nueva fase presenta un panorama aún delicado, pues la semana anterior hubo un promedio diario de 13 mil 324 nuevos casos y 330 decesos.
‘Nunca como en este período, con el encierro, hemos entendido lo que es Italia sin cines abiertos, sin teatros abiertos, sin música en las plazas, sin museos llenos de visitantes, expresó el ministro de Cultura, Dario Franceschini, al exponer ante la Cámara de Diputados y el Senado las líneas programáticas de ese organismo.
Cuando esta emergencia finalmente pase, apuntó, ‘habrá una explosión, una suerte de nuevo renacimiento de la cultura, en el que los museos deben jugar un papel importante, abriéndose como centros de innovación, investigación, estudio’.
Argumentó que el rol que puede jugar el mundo de la cultura es realmente importante para el renacimiento y precisó la importancia de recordar ‘cómo hicieron nuestros padres y abuelos en la posguerra y a menudo sucedió en la historia de Italia después de las grandes crisis. Debe haber una gran capacidad para reiniciar y la cultura debe ser el motor de este reinicio’.
Este lunes marca la reapertura a la vida cultural, aunque con las limitaciones que impone la situación epidemiológica, pero igual es un día señalado para Italia, pues el primer ministro, Mario Dragui, presenta al Parlamento el Plan de Recuperación.
Esa iniciativa incluye gastos para cinco años ascendentes a 222 mil 100 millones de euros, 191 mil 500 millones de estos aportados por la Unión Europea.
El plan de recuperación del sector de la cultura, según informó Franceschini, tiene seis mil 675 millones de euros, de los cuales también más de 1,4 mil millones corresponden al fondo complementario del Plan Estratégico de Grandes Atractores Culturales, que incluyen 14 intervenciones.
Están entre estas el puerto Viejo, de Trieste;el estadio Franchi, de Florencia; el antiguo complejo de la Minifábrica de Tabacos, en Palermo; el museo del Mediterráneo Waterfront, en Reggio Calabria, así como la restauración del Palomar, en Trapani; y la recuperación del hotel de los Pobres, en Nápoles.
Los más de 6,6 mil millones de euros del plan contemplan acciones para incrementar el atractivo del ‘sistema cultural y turístico del país mediante la modernización de las infraestructuras, tanto tangibles como intangibles’.
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